Las capacidades transformadoras son aquellas fundamentales para que niños y jóvenes idealicen un sentido de responsabilidad por el mundo y colaboren para tornarlo un lugar mejor.
Creemos que determinadas habilidades, como la empatía y la creatividad, pueden y deben ser trabajadas y aprendidas en la escuela. Son fundamentales para que los niños y los jóvenes construyan un sentido de responsabilidad por el mundo y asuman un papel de protagonismo en los cambios, renovaciones y cuidados demandados por las diferentes realidades del hoy y del mañana.
Al delimitar la empatía, el trabajo en equipo, la creatividad y el protagonismo como las cuatro capacidades claves para enfrentar los desafíos de nuestro tiempo, no pretendemos sugerir que sean las únicas necesarias para promover una educación capaz de formar personas transformadoras. Se trata de un recorte que tiene por base un detallado estudio de estrategias y puntos de vista adoptados por más de 700 emprendedores sociales, cuyas acciones tuvieron impacto positivo y relevante en la construcción de realidades más justas y amigables.
EMPATÍA
Capacidad de oír y aceptar las ideas de otras personas, así como de articular las propias. Salir del ‘yo’ para penetrar en una visión más profunda del mundo, a partir del reconocimiento de nuevas (y diferentes) miradas, siendo capaz de conectarse de forma activa y consciente con los sentimientos y perspectivas de otras personas.
TRABAJO EN EQUIPO
Capacidad de trabajar en equipo, en la diversidad, emprendiendo acciones en grupo a favor de resultados comunes. Ser capaz de liderar, de forma colaborativa, asumiendo roles diferentes y complementares.
CREATIVIDAD
Capacidad de expresarse por medio de diferentes lenguajes y de crear nuevas soluciones para problemas identificados en los diferentes palcos y realidades. Para tal es necesario dar prioridad a aprendizajes activos y valorar la autonomía y la autoría de los alumnos y alumnas.
PROTAGONISMO
Capacidad de tomar iniciativas a favor de la transformación de la realidad social, buscando el compromiso y la participación en su ambiente. Desarrollarse a partir del despertar del pensamiento crítico, que aporta consciencia para los problemas a su alrededor.
